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Hablamos con Kate, una misionera estadounidense que estudió y actualmente trabaja en el instituto bíblico Palabra de Vida. Kate comparte cómo llegó al instituto, algunas experiencias que tuvo allí y cómo Dios la llamó a las misiones. También nos alienta a buscar primeramente a Dios, su reino y su justicia, porque ni nuestro trabajo, ministerio, dinero, familia, ni ninguna otra cosa nos puede satisfacer, solo Cristo. ¡No te pierdas esta entrevista tan animadora!


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EA0893 – Entre Amigas –
Instituto Palabra de Vida



Entrevista a Kate

Victoria: Es un gusto, amigas, estar con ustedes en este momento de la entrevista. Hoy tenemos a una nueva amiga de Palabra de Vida que nos está visitando aquí, en Uruguay. Kate, te damos la bienvenida. Muchas gracias por estar con nosotros.

Kate: No, gracias a ustedes.

Victoria: ¿Podés contarnos un poco de cómo fue tu llegada a Palabra de Vida? Hemos estado conversando también con otras amigas que también están allí, pero sos la que llegó hace más tiempo.

Kate: Sí, exacto.

Victoria: ¿Cómo fue tu llegada?

Kate: Bueno, yo llegué a Argentina cuando tenía 18 años. Ya tengo 23, así que hace más de 5 años que estoy en Palabra de Vida. Llegué para hacer el programa bilingüe, como las otras chicas que están acá. Fui para aprender el español, para tener un programa de estudio bíblico, para conocer más a Dios, y después volver a mi país. Esos eran mis planes, pero Dios los cambió totalmente. Al terminar el primer año Dios me llamó para que me quedara un segundo año, y así pasó los siguientes dos años también. Escuchando la voz de Dios decidí quedarme en Palabra de Vida. Por la gracia de Dios mis papás me apoyaron, y Dios proveyó de una manera impresionante con el dinero también, para permitirme seguir con los estudios. Ya para el tercer año estaba muy segura de que Dios quería que yo lo sirviera en misiones en algún lugar. No sabía cómo ni donde, pero sabía que tenía ese llamado de servir de esa manera. Fue por eso también que decidí quedarme. Ahora estoy trabajando con el programa bilingüe como misionera con Palabra de Vida.

Victoria: Kate, quisiera preguntarte acerca del programa de estudio de Palabra de Vida. Nos decías que son 3 años. ¿En esos años estaría completo? ¿Cómo es el tema de los niveles de estudio?

Kate: Hablando estrictamente sobre el programa en español, no el programa bilingüe, en sí son 4 años. Yo solo hice 3 porque estaban en una transición, introduciendo el cuarto año, cuando yo terminé, y yo quería estudiar en una universidad de Estados Unidos. Entonces ahora estoy estudiando allí online en lugar de seguir y hacer el cuarto año. El primer año, consiste en estudio básico de teología, y te da toda la base que uno necesita para poder estudiar la Biblia, para poder servir al Señor. Podés entones graduarte de primer año, y dejar ahí. El siguiente nivel lo conseguís recién al terminar el tercer año de instituto. Entonces podés seguir con segundo y tercero, y ahí te graduás del programa completo. Ese es un estudio más intenso de teología, mucho más detallado, hay muchos más trabajos prácticos estudiando, leyendo, y de distintos libros de la Biblia se seleccionan algunos que se estudian a profundidad. Ahora están haciendo el cuarto año, que lo llaman CMM, y es un curso para misiones, más específicamente para personas que están buscando ir al campo misionero a tiempo completo. Este curso los prepara de distintas maneras, con clases en las cuales ven los distintos tipos de misiones. Entonces estudian cómo es trabajar con misiones en las prisiones, cómo es trabajar con musulmanes, cómo es trabajar con personas con discapacidades, todas esas cosas, para que vos puedas ir viendo a cuál de esas cosas, o de otras, Dios te está llamando a hacer.

Victoria: Claro, y aunque el llamado sea uno solo, estar capacitado para poder trabajar con todo el resto también.

Kate: Exacto, tal cual.

Victoria: En tu caso, ¿de qué país venís?

Kate: Yo soy de Estados Unidos.

Victoria: ¿Cuáles son las nacionalidades de los que están estudiando allí, en Palabra de Vida?

Kate: En Palabra de Vida tenemos más de 20 países representados. Casi todos son de Sudamérica pero también hay estadounidenses, alemanes, suizos, italianos, griegos, y de otros países de Europa. Los extranjeros muchas veces vienen en el verano para ir aprendiendo el español y luego entran directamente en el primer año. Hay mucha variedad de personas ahí en Palabra de Vida.

Victoria: Bien variado, bien transcultural, cosa que vayan teniendo una primera idea antes de salir a las misiones o a donde sea que vayan. Kate, hablabas del enfoque en misiones y en estudiar la Biblia. En realidad misiones están presentes en toda la Biblia, ¿no es así? A veces pensamos que solo en el Nuevo Testamento, pero al mirar más detenidamente vemos que en toda la Biblia se habla de las misiones.

Kate: Sí.

Victoria: ¿Cómo son las distintas realidades de los chicos y las chicas que van a estudiar a Palabra de Vida?

Kate: Vienen de muchos contextos diferentes. Esa es una de las cosas que me encantan de Palabra de Vida, porque vos podés llegar de cualquier contexto y las clases, el discipulado, los consejeros, los misioneros, todo está apuntado a vos aunque vengas de un contexto completamente distinto del de la persona que tenés al lado. Tenemos personas que vienen con trasfondo de drogas, con trasfondo de abuso, quizás recién recibieron a Cristo y están empezando el primer año, entonces son creyentes muy nuevos que no tienen nada de contexto de lo que es ser un cristiano, de lo que es realmente vivir como un cristiano. Después tenés personas que son tal vez hijos de pastores o de misioneros, que han estado toda su vida en la iglesia, en campamentos de la iglesia, quizás hasta adentro de Palabra de Vida, y también están en primer año, escuchando al mismo profesor, la misma clase, la misma materia y estudiando la misma Biblia que el que recién se convirtió. Pero es una cosa hermosa, porque la Palabra de Dios es viva y habla a la vida de cada uno, aunque sean de contextos y de cultura totalmente distintas.

Victoria: Simultáneamente el mismo mensaje tiene un efecto distinto en cada una de las personas y en lo que están necesitando, ¿no?

Kate: Exacto.

Victoria: Kate, nos contabas que llegan personas con distintos contextos, con distintos trasfondos, y vos lo viviste como estudiante, pero ahora estás desde el otro lado. ¿Cuáles son los cambios, o cuáles son las cosas más importantes que has visto que han marcado la vida de las personas?

Kate: Bueno, obviamente lo más importante que marca las vidas de las personas es la Palabra de Dios. Muchas veces los chicos, especialmente los que vienen de Estados Unidos o de Europa, vienen de un contexto de primer mundo. Un lugar en el que tienen todo, tienen todas las oportunidades como para hacer lo que ellos quieren, pero deciden venir y estudiar un año en Argentina, que es un contexto completamente distinto. Al estar en esa cultura, en la que quizás las personas no tienen las mismas oportunidades que ellos tienen, son humillados con la humildad con la que se encuentran. Pero más que nada es la Palabra de Dios. Es hermoso ver como a través de las clases, a través de sus consejeros y de los encargados, a medida que nos vamos involucrando en sus vidas, Dios realmente va marcando sus vidas y Él pasa a ser la satisfacción que ellos están buscando.

Victoria: Muchas veces pueden llegar pensando que renunciaron a muchas cosas, que no van a poder ver a sus amigos, a sus familias, pero ¿qué es lo que encuentran ellos en el instituto?

Kate: Encuentran que en esas cosas en las que buscamos la satisfacción, en nuestros amigos, en nuestras familias, en un noviazgo, en tener dinero, en la seguridad económica o laboral, en saber qué viene después, no la encontramos. Especialmente nosotros, los que venimos del extranjero, no nos adaptamos bien a no saber qué es lo que viene después. Pero ellos encuentran esa satisfacción en Cristo, esa es la realidad con la que se enfrentan muchas veces al no tener esas cosas. Se aferran más a Dios porque no tienen a sus amigos, a su familia, su comodidad, entonces acuden a lo que les da la verdadera satisfacción: Cristo.

Victoria: En este momento, en el que estás trabajando en la parte de administración y de recibir a los alumnos, ¿te ha pasado de verte a vos misma reflejada en otra alumna y poder ver que pasa por lo mismo que vos cuando llegaste?

Kate: Sí. Muchas veces veo partes de mí en varias chicas. Quizás chicas que están luchando con someterse a las autoridades, a las reglas, eso era algo con lo que yo luchaba. También hay una chica que busca satisfacción en algo que no es Dios, y justo en estas semanas yo había estado orando y leyendo sobre esa satisfacción que yo, y creo que todos muchas veces, buscamos en otras cosas: en el trabajo, o incluso en nuestro ministerio también. Pero es importante saber que no lo vamos a encontrar. Yo estaba estudiando ahí en Mateo 6 un versículo muy conocido, que es el que dice “Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas”. Justamente esa semana pasada ese versículo cobró un nuevo significado para mí. Porque muchas veces pensamos “yo quiero un noviazgo, quiero una amiga, quiero poder hablar mi propio idioma, quiero seguridad, quiero dinero”. Buscamos todas estas cosas pero no encontramos la solución, no sabemos cómo llegar a no sentirnos así, como tener satisfacción en Cristo y no en esas cosas. Pero lo dice claramente en ese versículo: en primer lugar debemos buscar el reino y la justicia de Dios. Y poder compartir esto con las chicas, que sin importar lo que está pasando, la situación o el contexto que estén pasando, lo que necesitan es buscar primeramente a Dios, buscar tener una relación personal y profunda con él. Solo ahí encontrarán la verdadera satisfacción.

Victoria: Cuántas veces ponemos en primer lugar nuestras propias metas, pero siempre que conseguimos lo que buscamos, pasamos a querer algo más. Nunca nos satisface. Cuando llegamos a tener una relación con Jesús, cuando lo conocemos, ahí es cuando realmente encontramos esa perla de gran precio.

Kate: Exacto.

Victoria: Kate, ha sido un gusto tenerte con nosotros, felicitaciones por el trabajo que estás haciendo y gracias por animarte a hacerlo. Porque sin los misioneros y sin las personas que se animan a salir de su comodidad para servir a Dios, muchos de nosotros nunca habríamos tenido la oportunidad de escuchar de Jesús y de esta esperanza tan hermosa que tenemos en él. A nuestras amigas que nos escuchan, las invitamos a que continúen escuchando Entre Amigas y que no se pierdan el próximo programa.

Kate: Muchas gracias por tenerme.

Victoria: ¡Hasta la próxima!

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