Eutanasia – Parte 1
6 octubre, 2020
Judas Iscariote y el cristianismo moderno
14 octubre, 2020
Eutanasia – Parte 1
6 octubre, 2020
Judas Iscariote y el cristianismo moderno
14 octubre, 2020

Continuamos hablando con el doctor Jorge Patpatian sobre la Eutanasia, entendida como la acción o omisión que acelera o causa la muerte de un paciente. Te invitamos a conocer más sobre el proyecto de ley que la defiende, la posición del cuerpo médico, y la perspectiva bíblica sobre este tema. ¡No te pierdas de la segunda parte de esta entrevista!


DESCARGARLO AQUI:
EA0998 – Entre Amigas –
Eutanasia – Parte 2



Entrevista a Jorge Patpatian

Victoria: Bienvenidas, amigas, una vez más, al tiempo de la entrevista, en esta oportunidad para continuar conversando sobre la eutanasia con nuestro entrevistado el Dr. Jorge Patpatian, a quien le agradecemos nuevamente por estar con nosotros. Si le parece, doctor, podríamos hacer un breve resumen de lo que comentábamos en el programa anterior y desde allí partir con lo que será la continuación de este tema.

Jorge: Sí, cómo no. En el programa pasado hablábamos que desde la asociación médica mundial hasta el sindicato médico del Uruguay hace aproximadamente 8 años se ha presentado un código de ética médica que fue aprobado por más del 80% del cuerpo médico nacional, donde uno de los artículos de este código de ética médica, que fue transformado en una ley en setiembre de 2014 promulgada por el poder ejecutivo, señalaba que la eutanasia activa, entendida como la acción o la omisión de acelerar o causar la muerte de un paciente, es contraria a la ética de la profesión. ¿Qué significa esto? Que más del 80% del cuerpo médico en el Uruguay ha dicho “no” a la eutanasia, hace relativamente poco tiempo, porque estamos hablando del 2014.

Desde esa fecha hasta ahora todos los doctores nos hemos silenciado con este tema, ninguno de nosotros ha perdido el sueño porque había una ley o un código que no permitía acelerar la muerte de un paciente. No fue nunca un problema, porque lo entendimos así, porque lo promulgamos en una ley, en un código que se transformó luego en ley. Pero en febrero de este año, del año 2020, uno de los diputados o representantes nacionales ha visto, a través de la influencia que ha tenido sobre algunos de los pacientes que se han quejado, especialmente uno con una enfermedad degenerativa, sufriente, y ha dicho que en este país no existe la posibilidad del suicidio asistido mientras que realmente tendría que haber algo así.

El diputado, oyendo esa situación, entendió que había que elaborar un proyecto, presentarlo al parlamento y ver la posibilidad de que esto pudiera cambiar, de que este cambio legislativo permitiera a los médicos acelerar la muerte de sus pacientes. Ahí nos quedamos, a partir de eso empezó la discusión. Algunos de nosotros estamos en contra, otros están a favor de esta situación, y esto fue presentado a través de estadísticas e investigaciones que el sindicato médico del Uruguay ha hecho en estos últimos meses.

Hace 12 días estaba caminando, haciendo un poco de ejercicio y me llegó una llamada de equipos consultores que justamente me decían eso, que querían encuestar a los médicos para conocer la opinión de ellos. En realidad me llamó mucho la atención, porque si hace pocos años los médicos nos expresamos en contra, ¿qué es lo que hace estos cambios después de apenas 6 años? ¿Qué cambios podrían existir en la vida médica nacional para que nosotros ahora nos preocupemos por interrogar a los médicos a ver si están de acuerdo o no con la eutanasia?

Por otro lado, quiero decir que esta encuesta ha sido muy sesgada por el lado de que se preguntó más de una vez cuál es la actitud médica frente a dolores insoportables, y yo digo que no hay dolores o sufrimientos insoportables. Si un paciente tiene sufrimientos insoportables la solución no es morirse, sino que cambiar de equipo médico. Si tú o yo mañana tenemos un dolor insoportable y tenemos un médico que viene todas las semanas, le vamos a decir: “doctor, o me quita el dolor o me cambio de médico”. Porque hoy la medicina ha avanzado tanto que puede, a través de sus armas terapéuticas, quitarle el dolor y el sufrimiento insoportable a un paciente.

Victoria: Una de las cosas que se expresa por parte de quienes argumentan a favor de este tema es la defensa de lo que llaman el “buen morir”.

Jorge: No es el “buen morir”, porque el “buen morir” es otra cosa, que no entra dentro de la eutanasia. Buen morir se denomina, justamente, cuando un paciente tiene todos los recursos necesarios, todo el equipo asistencial imprescindible, para poder mitigar su dolor, estar acompañado, recibir una asistencia profesional médica, psicológica psiquiátrica, si es necesario, espritiual, donde se le pueda mitigar, calmar y solucionar sus problemas al final de su vida, sin que pase por sufrimientos insoportables. Eso es una muerte digna. Lo digno no es matarlo, lo digno es que no sufra, lo digno es acompañarlo, es asistirlo con una calidad profesional alta. A veces los médicos tenemos que reconocer que pensamos que no podemos hacer nada con un paciente porque no tiene cura. Pero el paciente no nos pide solo que lo curemos, nos pide que lo tratemos, que lo acompañemos, que le demos valor desde el punto de vista médico, que lo tratemos como si tuviera la patología que más nos gusta tratar. La persona no quiere morir, lo que no quiere es sufrir, pero no quiere quitarse la vida.

Victoria: Otra de las realidades que reflejaban estas encuestas es que la mayoría de la población estaría a favor.

Jorge: En otros países se han hecho encuestas de esta naturaleza y en general los jóvenes responden a favor de la eutanasia. Pero cuando llega un hombre de 70, 75 años, entra en el hospital y usted le pregunta ¿quisiera que acá le hicieran eutanasia? Te va a decir que no, porque nadie quiere que lo maten. Las personas adultas no queremos que nos maten ni hacer nada para matarnos. Son los jóvenes, que ven la muerte tan lejos que si les preguntás te van a decir “no, sufrir no quiero, prefiero que me maten” porque saben que no van a morir, porque saben que para eso falta una cantidad de tiempo y ven la muerte desde un punto más ideológico que real, entonces contestan en ese sentido.

Cuando desconocemos el tema y cuando estamos muy lejos de una situación, las respuestas pueden no ser las más adecuadas. Yo espero que el parlamento nacional no se guíe por estas encuestas, porque pueden darse equivocaciones muy peligrosas cuando se toman decisiones en base a este tipo de encuestas, que son muy sesgadas, muy parcializadas y dirigidas. Esto viene desde Hipócrates, desde cinco siglos antes de Cristo se habla de que la eutanasia no es tarea médica. Mi responsabilidad no es matar a un paciente ni darle un fármaco para que se mate. Mi responsabilidad es prevenir la enfermedad, tratar la enfermedad y calmar el dolor y el sufrimiento cuando no puedo ni prevenir ni tratar la patología. En ese sentido escapa mucho lo que es la labor médica.

Victoria: Doctor, ¿se puede decir que económicamente la eutanasia abarataría costos?

Jorge: Sin dudas, porque la eutanasia y el suicidio asistido no cuesta nada. Son solamente 15 días, según el proyecto de ley, donde el paciente tiene que expresar su voluntad, a los dos días se le pregunta otra vez y se espera dos semanas. Si el paciente sigue con el deseo de quitarse la vida, entonces el médico le da un fármaco o le acelera esa posibilidad. Ante eso no tenemos gastos. Por supuesto que los gastos de salud van a disminuir, pero acá no estamos haciendo un negocio, esto no es una producción con fines puramente económicos y para tener un perfil ganancial para mi bolsillo. Estamos jugando con vidas y acá tenemos una gran responsabilidad, no solamente desde el punto de vista ético, comercial o empresarial en la prestadora de salud en la que estamos, sino que también tenemos un compromiso ético con el paciente, que tenemos que buscar el bienestar del paciente, y el bienestar del paciente no es matarlo ni destruirlo.

Ahora, un argumento que a mí me parece importante decirlo es que dentro de la exposición de motivos de este proyecto de ley se dijo que existen otros países que lo hacen, y que hay que acomodarse, actualizarse a eso.

Victoria: Estamos hablando de unos 5 o 6 países en realidad.

Jorge: Tenemos 6 países de los cuales en dos no está aprobado en todo el país. Cuando hablamos de que la mayoría de los países se están adaptando es una mentira. Cuando decimos que hay una tendencia internacional a probar la eutanasia es una mentira, porque estamos hablando de menos del 5% de los países del mundo. En el mundo hoy tenemos 215 países aproximadamente, y estamos hablando de 6. Seis en 215 es mucho menos que el 5%.  Entonces, ¿con el 5% puedo hablar de una tendencia, cuando el 95% de los países le dijeron que no a la eutanasia y le siguen diciendo que no? ¿Cuando en Portugal vemos que en este año se ha querido aprobar y que se utiliza dentro de este proyecto de ley como argumento que Portugal lo ha aprobado cuando en realidad dijo que no por presión de sus habitantes?

Hay otro argumento que creo que es importante. Uno de los motivos dice que esta es una realidad oculta que se hace en los medios hospitalarios, y que hay médicos que lo hacen. Entonces, como hay médicos que lo hacen, vamos a tener que hacer una ley para cristalizar esto, para que los médicos tengan la facultad, que si ven la necesidad de hacer eutanasia no estén condenados en un hecho ilícito. Yo quiero decir que debemos tener cuidado con este argumento, porque femicidios hay cada día más, rapiñas hay cada día más, entonces, ¿yo puedo legalizar la rapiña o el femicidio porque hay rapiñas o femicidios? ¿o tengo que seguir condenándolo? No puedo argumentar que porque hay médicos que en alguna oportunidad lo hicieron se debe legalizar. Si hay médicos que lo hicieron denúncienlos.

Es al vuelo decir que los médicos hacemos eutanasia. Yo no hago eutanasia y conozco a gente que no hace eutanasia, que lo que quiere es hacer cuidados paliativos. Entonces, frente a esta situación, ¿yo puedo decir que porque los médicos lo hacen tengo que ampararlos a ellos, que tiene que haber una ley que los proteja para que no sean condenados? ¿O tengo que condenar el hecho y decir: si usted está haciendo eutanasia, sepa que va en contra de la ley. Si usted está haciendo femicidio, si está haciendo una rapiña, está en un hecho antijurídico en el que le está produciendo un mal a la sociedad y merece ser castigado? En esta situación es lo mismo, yo no puedo hacer una ley diciendo que porque otros lo hacen, entonces vamos a legalizarlo.

Victoria: Muy bien, ha sido un gusto, doctor, compartir con usted.

Jorge: Mucho gusto, gracias.

Victoria: Y a ustedes, amigas, las invitamos a que sigan escuchando el programa, atentas también a estas movidas, a este tipo de legislación que se está queriendo impulsar en distintas partes del mundo, que podamos estar atentas a ese tipo de cosas. ¡Hasta la próxima!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Elija su moneda
UYU Peso uruguayo