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La comunicadora y productora de radio y televisión Carolyn Pinzón nos relata su impactante testimonio de vida y cómo a través de la discapacidad Dios ha obrado en ella y a través de ella para Su gloria. No te pierdas de su testimonio de vida y de conocer el hermoso trabajo que ella realiza hoy en día.


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EA1095 – Entre Amigas –
La historia de Carolyn Pinzón



Entrevista a Carolyn Pinzón

Victoria: Bienvenidas, queridas amigas, a un nuevo programa de Entre Amigas. Hoy vamos a estar charlando con Carolyn Pinzón, quien se encuentra en Orlando, Florida, en Estados Unidos, así que Carolyn, gracias por estar en contacto con nosotras, bienvenida.

Carolyn: ¡Gracias a ti! Qué privilegio, qué regalo poder estar contigo y con toda la audiencia.

Victoria: Caro, vos sos comunicadora, productora de radio y televisión, estás casada con Pablo Pierotti, tenés dos hijos de 8 y 4 años, ¿puede ser?

Carolyn: Sí, estoy casada ya hace 10 años, mi esposo es argentino y tengo una nena de 8 años, Antonella, y un nene de 4 años que se llama Leandro.

Victoria: Y tú naciste en Bogotá, en Colombia, ¿no?

Carolyn: Nací en Bogotá, Colombia, pero a la edad de 11 años nos vinimos a vivir a Estados Unidos. Así que creo que soy un poquito más americana que colombiana.

Victoria: Igual el español lo hablás muy bien, no hay grandes modificaciones, ¿no?

Carolyn: No, la verdad que creo que uno de los regalos que hicieron en mi casa es que no nos permitían hablar inglés. Entonces eso hizo que el español de todas nosotras se mantuviera. Hablábamos afuera el inglés con nuestros amigos, pero en la casa no nos permitían hablar en inglés ni ver televisión en inglés, entonces eso mantuvo también el idioma.

Victoria: Claro. Carolyn, vamos a hablar un poquito de tu perfil como comunicadora, también productora de radio y de televisión, pero antes tenemos que hacer mención que algo que se descubrió muy temprano en tu infancia y que además hizo que tu familia definiera ir a Estados Unidos, porque a la edad de 9 años tu familia se dio cuenta de una situación que vos estabas atravesando y eso hizo que se tomaran determinadas decisiones. ¿Nos podés contar un poquito de esto?

Carolyn: Claro que sí. A la edad de un poquito antes de los 11 fue que sucedió esto. Yo siempre usé gafas, o lentes, siempre tuve miopía y astigmatismo, pero hubo un momento en el que ya mi visión empezó a ser un poco diferente, entonces me empezaron a llevar a muchos médicos, especialistas, y descubrieron que tenía la enfermedad de Stargardt, que en realidad es una enfermedad que se da en una de cada mil personas, o un poquito más. Es una enfermedad bastante rara, es la combinación de dos genes exactos, que cuando se combinan sale una persona como yo. Ahora, por ejemplo, si mi papá y mi mamá hubieran tenido más hijos, de 5 hijos, uno sale con Stargardt. Así que es muy rara. Yo soy hija única, me tocó a mí, y lo que la enfermedad hace es que voy perdiendo la visión central, solo me queda la visión periférica, entonces tengo una mancha en la mitad del ojo. En la mitad del ojo están todos los detalles, tu lees con la mitad del ojo, digamos. Todo lo que son detalles pequeños, lectura, colores, dimensiones, todo eso está en la mitad del ojo. Así que en Colombia me condenaban a ser ciega, de alguna manera, porque desafortunadamente en nuestros países aún, hasta el día de hoy, no se sabe trabajar con personas con discapacidad.

En el colegio en el que yo estaba se sintieron de manos cruzadas y querían que yo estudiara braille, la lectura de ciegos. Mi tía ya vivía en Estados Unidos, entonces le dijo a mi mamá, “¿Por qué no te vienes? Aquí en Estados Unidos hay un futuro más amplio para las personas con discapacidad”. Así que ahí es cuando empieza un antes y un después. Mi mamá deja todo, y nos venimos a vivir a Estados Unidos, precisamente para poder darme un futuro diferente y bueno, gracias a Dios eso se cumplió.

Victoria: ¿En qué forma mejoró tu situación el irte a Estados Unidos?

Carolyn: Pues mira, al principio no fue fácil. Fue horrible. Realmente fue espantoso, primero porque yo ya estaba en una preadolescencia y esa etapa es mucho de amigos, de compartir, yo ya tenía un grupo de amigos muy formado en Colombia, pero de un momento a otro me cambia la vida porque yo dejo de ver, entonces ya en Colombia empecé a recibir bullying, se burlaban de mí. Yo había participado en muchas cosas siempre, hacía gimnasia olímpica, estaba en los bailes, estaba en equitación, y de un momento a otro mi vida cambia. Entonces cuando nos vinimos a vivir a Estados Unidos, si bien yo no entendía, porque en medio de mi niñez yo no entendía bien lo que me estaba pasando, yo sí sabía que había dejado a todo mi mundo y mi grupo de amigos atrás. Entonces eso fue emocionalmente muy difícil. Y luego, llegar a un país donde entienden, porque eso es verdad, tienen otra apertura a la discapacidad, entienden más de trabajar, tienen más ayudas, pero yo no tuve las ayudas inmediatamente. Entonces yo entré a un colegio, los colegios aquí son como en las películas, tal cual, está el bullying, que te agarran la leche y te la tiran encima del almuerzo, cosas así, muy fuertes, entonces yo llegué sin un idioma, con una enfermedad nueva, dejando a todos mis amigos atrás, y fue muy difícil. Yo recibí mucho bullying en el colegio. Yo tenía un aparato, como un telescopio, que era la única ayuda que yo tenía para poder ver el tablero. Entonces se burlaban, me decían pirata, cosas así.

Esa es una cosa de mi enfermedad que, de alguna manera, gracias a Dios, tu me ves y no parece que lo tengo. Pero sí lo tengo. Entonces había profesoras que no me creían, y entonces se burlaban de mí, no dejaban que nadie me ayudara, y todo eso hizo que fuera muy, muy difícil. Tampoco teníamos los papeles como estadounidenses para recibir las ayudas legales de Estados Unidos, entonces era muy difícil porque no tenía nada. Lo único que yo tenía era un telescopio para poder copiar. El resto era a través de mis amigos o personas que me leyeran.

Victoria: Carolyn, para todos es difícil la adolescencia, y se acentúa con este tipo de situaciones. ¿En algún momento se llega a normalizar, se aprende a vivir con esto? ¿Cómo se procesa, cómo se sigue adelante con esta situación que vos muy bien la relatabas? ¿Cómo ha sido para vos eso?

Carolyn: Sí, gracias a Dios yo tuve una familia que me ayudó y que nunca me metió en una burbuja. Creo que eso es una de las cosas más importantes. Yo creo que fue muy difícil el adaptarme al saber que ya no iba a ver, o que no iba a ver bien, y que iban a haber muchas cosas que yo no iba a hacer, pero sí recuerdo que tanto mi mamá como mu abuelito me decían “tú no eres tu enfermedad”. “Tú eres Carolyn, y a Carolyn lo la define Stargardt, a Carolyn no la de fine que tiene problema visual. A Carolyn la definen un montón de cosas”. “Tú eres Carolyn Pinzón CON una discapacidad”. Siempre me llevaron a ir más allá de los límites. Mi mamá siempre me decía “Caro, tú conoces tus limitaciones. Si tu crees que puedes montar bicicleta, monta bicicleta. Si tú ves que en algún momento puede ser peligroso, no lo hagas”. Y así con todo, nunca fue como “ay pobrecita, ella no puede”.

De hecho, tengo que confesar que en la adolescencia yo me enojaba mucho con mi mamá porque cuando era principio de año mi mamá iba a hablar con los profesores y les decía que me trataran como una niña normal, que me dieran los mismos trabajos, los mismos exámenes, solo que con el tiempo que ella requiere. Obviamente yo me demoraba mucho tiempo más. Pero mi mamá les decía a los profesores que me trataran como una niña normal, nada de “pobrecita”, nada de que ella no haga lo mismo que hacen los demás. Y a mi me daba mucho mal genio, porque decía “mi mamá no tiene ni idea de lo que tengo que hacer, no sabe cómo son mis ojos”. Pero yo creo que en medio de todo mi mamá sabía que yo podía, entonces nunca permitió que yo estudiara braille, para que en mi cerebro no entrara que yo era ciega, nunca permitió que yo entrara a un colegio especial, siempre estuve en un colegio normal, con personas normales, haciendo las cosas normales, y creo que eso fue de las cosas que me ayudó a verme normal, digamos.

Sí había cosas que no podía hacer, obviamente cuando mis amigos empezaron a poder manejar, a ser independientes, yo eso jamás lo he podido hacer, en eso no soy independiente, entonces ya para mí era difícil siempre estar dependiendo. Es muy horrible tener que estar todo el tiempo dependiendo. Pero bueno, digamos que empiezas a conocer personas que se convierten en ángeles, en personas que te ayudan, que te levantan los brazos, que a pesar de cualquier cosa yo la verdad miro hacia atrás y recuerdo a las compañeras que se sentaban a mi lado y me dictaban y tenían que hacer doble trabajo, y solo lo hacían por amor, por empatía, por entender. Entonces creo que sí uno conoce gente muy mala, porque se burlan de ti o te hacen la vida imposible, por ejemplo, tuve una profesora que me hizo llorar mucho, pero luego fue la persona que Dios usó para que me abrieran las puertas en este país y me dieran las ayudas. Entonces creo que todo eso forma un carácter en ti. No pobretearte, porque eso es lo que hace que uno no pueda avanzar. Creo que eso fue lo que hizo que pudiera graduarme y luego hacer una vida normal.

Victoria: Claro. Carolyn, vos estudiaste en el instituto de artes, estás perfilada más bien para el mundo de la comunicación, contanos un poco de ello y después de voy a preguntar por un programa que seguramente te vas a acordar rápidamente, pero contanos un poquito acerca de cuál fue el camino que vos elegiste.

Carolyn: Sí, yo estudié comunicación social, vengo de una familia de comunicadores así que el amor y la pasión por las comunicaciones siempre han estado dentro de mí desde muy chiquita. Así que empecé en las comunicaciones, estudié en el instituto de artes de Florida, esa también es una historia, yo fui la primera que se graduó con una discapacidad visual de mi carrera, a mí no me querían dejar entrar en la universidad, tuve que ir por el camino legal, tuve reuniones, porque yo quería entrar a esa universidad. Creo que es una de las cosas importantes, a mí no me gusta que me digan que no puedo si yo sé que puedo. Entonces me decían “no, pero es que tu no vas a poder ver la consola” “es que tu no puedes ver la cámara”, entonces yo les dije “denme tres meses y yo me convierto en la mejor estudiante que han tenido”. Y la verdad que después de muchas reuniones y muchas cosas me dieron la oportunidad y me gradué en comunicación social, de radio y televisión. Eso es actualmente lo que hago y me encanta.

Victoria: Hay un programa que seguramente, más allá de lo que hacés actualmente, yo no sé si continúa el programa, pero tiene que ver con esto que vos relatabas, y el programa se llama Más Allá de los Límites. Contame un poquito cómo surge la idea, cómo te vinculás, y de qué iba, o va, ese programa.

Carolyn: Bueno, en este momento no lo estoy haciendo, pero lo hice por muchos años. Fue el primer programa radial que me dieron la oportunidad de hacer en La Voz, y fue un programa muy gratificante, fue un programa muy lindo, era mostrar precisamente que puedes ir más allá de los límites entonces había historias de ánimo, pero también se hablaba de biografías de personas con discapacidad de todo tipo, que salieron adelante, y personas que tal vez ni siquiera conocías que tenían una discapacidad. Por ejemplo, Tom Cruise es completamente disléxico, todos los libretos se los tenían que escribir al revés porque él no podía leer normal. O Bruce Willis era totalmente tartamudo, y al entrar al teatro esa tartamudez se le empezó a ir, y ahora es el actor que es. Así que mostrar un poquito y brindar un poco de ánimo era lo que hacía, más allá de los límites. También tenía entrevistas con distintas personas, me acuerdo de entrevistar a campeones en natación sin brazos, o muchachos que quedaron completamente parapléjicos por algún accidente automovilístico y eran campeones de base, cosas así. Creo que el programa fue muy lindo, y una de las cosas que más me llega al corazón del programa fue algo que me sucedió una vez.

Mi primer viaje a Argentina fue para cubrir un evento de jóvenes, y en esa época yo me estaba preguntando mucho si lo que yo estaba haciendo estaba llegando, porque La Voz es una radio en Miami, pero tú no tienes realmente esa conexión con el oyente, no tienes ese feeling con ellos. Y me acuerdo de que, en el avión, por muchas situaciones también emocionales que yo estaba teniendo, yo lloraba a Dios y le decía “Dios, yo necesito que me muestres que lo que estoy haciendo sí vale la pena”. Y me acuerdo de que estaba en el bus y vinieron a buscarme un grupo de entre 7 y 9 invidentes, y estaban buscando a Carolyn Pinzón. Cuando los conocí, todos me decían “gracias a ti, más allá de los límites, tomamos la decisión de estudiar comunicaciones”. Entonces eso para mí fue una forma de darme cuenta de que había valido la pena. Me acuerdo también de una chica que por un accidente de auto tenía todas las piernas quemadas y deformadas, y lo les hablaba mucho a las personas con discapacidad de que nosotros, como personas con discapacidad, tenemos que ser lindos, vestirnos bien, oler bien, cuidarnos. Y me acuerdo de que ella me decía “gracias a tu programa tomé la decisión de ponerme falda por primera vez y amar mi cuerpo, amarme tal y como soy ahora”. Creo que esos son testimonios de vida que te impactan el alma. Más allá de los límites, para mí es muy especial.

Victoria: Carolyn, nos estamos quedando ya sin tiempo, estamos llegando al final de la entrevista, pero de todas maneras quiero destacar algunos hechos, porque vos hablabas de Argentina y me imagino que Argentina también fue un antes y un después para vos porque por allí conociste a tu esposo.

Carolyn: Sí, precisamente en ese evento en el que fui en Argentina conocí a mi esposo, porque mi suegra trabajaba en La Voz, era la directora de afiliadas, era muy amiga de mi mamá y yo la conocía desde hacía muchos años, pero no sabía que tenía hijos. Entonces me mandaron a mí a trabajar con mi esposo actual, pero él y yo nos caíamos muy mal, no sé por qué. Pero ahí nos conocimos, empezamos a ser amigos, luego tuvimos una relación a larga distancia que fue muy difícil, después yo dejé todo, porque Dios nos empezó a hablar a los dos que sí, que estaba aprobada nuestra relación, entonces yo dejé todo y me fui a vivir a Argentina por un año, ahí me pidió la mano y nos casamos, y bueno, aquí estamos.

Victoria: Con dos hijos.

Carolyn: Sí, con dos hijos, felices.

Victoria: ¿En qué parte de Argentina, Carolyn?

Carolyn: Viví en Córdoba, en Villa María.

Victoria: Qué lindo. Y actualmente, corregime si me equivoco, sos bastante activa en redes sociales, ¿puede ser?

Carolyn: Sí, me encanta. En las redes sociales estoy trabajando mucho, también tengo un canal de YouTube donde hablo mucho también acerca de mis experiencias. A todos los oyentes yo les digo que soy la pequeña Lulú, quizás algunos recuerden quién es la pequeña Lulú, es una caricatura. Yo digo eso porque me ha pasado de todo en la vida, más allá de la discapacidad, he tenido muchas experiencias, las cuales tengo en el programa, y han sido de mucha bendición para las personas. Entonces empecé un canal de YouTube y también soy muy activa en las redes sociales, siendo muy yo, muy cómica, también hablo mucho de las cosas de Dios, de experiencias, así que tanto en Instagram como en Facebook o en YouTube estoy bastante activa.

Victoria: ¿Nos podrías pasar las cuentas? Porque quizás las oyentes quieren buscarte también.

Carolyn: En las redes estoy en todas como “Conectados”, porque el programa se llama Conectados con Carolyn Pinzón. Así estoy en las redes sociales. En Instagram soy “carolyn_pinzon”, en Facebook ponen “Conectados con Carolyn Pinzón” y en el canal de Youtube estoy como “Carolyn Pinzon”. Ahí me pueden buscar y nos hacemos amigos, me gusta mucho ser personal en las redes, yo le respondo personalmente a los oyentes o a las personas que escriban, me gusta tener contacto con la gente. Me gusta mucho.

Victoria: Está bueno eso, Carolyn, así que bueno, ese es el contacto. Yo te quiero agradecer muchísimo por estos minutos y te voy a decir algo sencillo, hay una persona que dice que es tu admiradora número uno, y ella es tu mamá, Norma, que nos contó un poquito la historia y bueno, te mandaba un saludo. Y le agradecemos a ella también, que en otro momento conversó con nosotras y está muy orgullosa de la hija que tiene.

Carolyn: Ay, qué linda. Yo a mi mamá le debo todo, ella dejó toda su vida por mí, por sacarme adelante, y es la mejor mamá que existe en la faz de la Tierra. De verdad que sí. Siempre me apoyó, siempre vio en mí lo que yo no veía, y fue ella la que me llevó a vivir más allá de los límites y a conocer al mejor de todos, que fue a mi Dios. Eso es lo más importante, ver un ejemplo en mi mamá en todos los ámbitos. Así que qué linda, gracias por eso.

Victoria: Carolyn, muchísimas gracias por este tiempo, sin dudas que te vamos a convocar nuevamente porque creo que hay mucho para conocer, también de la parte de comunicación, así que seguramente más adelante nos volvamos a comunicar, ¿te parece?

Carolyn: ¡Claro que sí! Aquí estoy para cuando ustedes quieran, un beso para ti y para toda la audiencia y gracias de verdad por contactarse conmigo.

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