La vida depende del papel higiénico
22 febrero, 2021Una vida transformada
23 febrero, 2021
¿Cuál es el efecto de la sal? ¡Hace tener sed! Ser sal se refiere a una vida que
produce preguntas, que despierta añoranza, por la esperanza que hay en
nosotros. Repetidamente nos han llegado solicitudes de información de
personas preocupadas a causa del avance tecnológico y de los rumores acerca de un chip debajo de la piel. ¿Qué debemos pensar de eso?
Sin lugar a dudas vivimos en un tiempo fascinante y desde muy cerca presenciamos cambios grandes. Primero, la caída del Muro de Berlín en 1989, luego los atentados terroristas del 11 de septiembre 2001; actualmente, la crisis global del coronavirus, las guerras en el Oriente Medio y ahora todavía los esfuerzos de paz «exitosos» en y alrededor
de Israel. Hace mucho ya que se habla de un cambio de siglo y de un nuevo orden mundial, y se nos impone la impresión, que se apresura el cumplimiento de la profecía bíblica. Como consecuencia del Covid-19 llegan a ser posibles cosas, que hace pocos meses atrás nunca se habría considerado como realizables: uso obligatorio de máscaras y medición pública de fiebre en la frente. Hay regulaciones nuevas. Cada vez más enfáticamente se habla de pagos sin efectivo, de vacunaciones y de un chip. Por un lado, las especulaciones y teorías de conspiración allí se pasan de la raya; por otro lado, cada cual ve que algo totalmente nuevo se nos viene.
Es muy posible que hayamos entrado en una fase en que la humanidad,
homogénea y mundial, sea estimulada para el tiempo que nos es descrito en el Apocalipsis. Al final, habrá un imperio global con dos soberanos anti-cristianos, y el ser humano se verá obligado a aceptar una señal, sin la cual ya no podrá vender ni comprar (Ap 13). De ya no existir el dinero en efectivo, estarán perdidos los que no llevan esa señal (marca). En todo eso
vemos lo rápidamente que se puede someter a pueblos enteros. En el periódico HAZ del 21 de agosto de 2020, bajo el título «La crisis del coronavirus es una oportunidad », dice, citando al Presidente del Parlamento Alemán Wolfgang Schäuble: «‹Europa como un todo debe tomar más responsabilidad, precisamente también en la política de seguridad y defensa› […] Al mismo tiempo él denomina la crisis del
coronavirus como una ‹gran oportunidad› para Europa. ‹La resistencia
contra el cambio disminuye en la crisis. Ahora podemos lograr la unión económica y financiera que hasta este momento, políticamente, no hemos podido establecer›.» Aún así, debemos sostener sobriamente, que la señal está en conexión directa con la adoración de la «bestia», y que no tiene relación alguna con aquellos que ya pertenecen al Señor Jesucristo. «Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió. Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase. Y hacía que a todos, pequeños y grandes, ricos y pobres, libres y esclavos, se les pusiese una marca en la mano derecha, o en la frente; y que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca o el nombre de la bestia, o el número de su nombre. Aquí hay sabiduría. El que tiene entendimiento, cuente el número de la bestia, pues es número de hombre. Y su número es seiscientos
sesenta y seis» (Ap 13:14-18).
Según nuestro entender, el chip o una vacunación (obligatorios, NdeT) no deberían ser equiparados con la marca venidera… pero quizás hablamos aquí de una parte del camino hacia allí.
Que la marca no tiene relación alguna con la Iglesia de los cristianos nacidos de nuevo, lo demuestran los siguientes indicios bíblicos:
• Según 1 Corintios 6:1-3, la Iglesia está destinada a juzgar al
mundo y a los ángeles. Como el tiempo del apocalipsis, incluyendo
Apocalipsis 13, es el tiempo del juicio de Dios para el mundo, partimos
de la base que la Iglesia ya se encuentra en la gloria de Jesús y que, como Su cuerpo, juzgará al mundo juntamente con Él como cabeza. Recién cuando la cabeza y el cuerpo estén unidos se habrá alcanzado la plenitud, que cumple
todo en todo; y los acontecimientos apocalípticos a continuación tomarán su rumbo (cp. Ef 1:23).
• La Iglesia de Jesús está sellada con el Espíritu Santo (Ef. 1:13; 4:30). Eso significa que ella no puede, a su vez, ser sellada con una marca diabólica, anti-cristiana, perdiendo así el sello del Espíritu. Si en el futuro los 144.000 sellados por Dios de entre las doce tribus de Israel no pueden ser dañados
(Ap. 7:14), cuánto menos entonces la Iglesia que es el cuerpo de Cristo.
• La Biblia nos explica claramente, que el tiempo del apocalipsis es el tiempo de la ira de Dios (Ap. 6:16-17). De la Iglesia, sin embargo, dice que ella no está expuesta a la ira (1 Ts. 1:10; 5:9). Además, dice la Biblia, que solo los hijos de desobediencia están destinados para el tiempo de la ira del Señor (Ef. 5:6; Col 3:6).
• La Biblia enseña a la Iglesia su indiscutible seguridad de salvación en Jesucristo (ver por ej. 1 Co. 1:30; 2 Co. 5:17; Jn. 14:16; Ro 8:39; 1 Jn. 2:27; 3:9; 4:13 entre otros). Dice además, que aquellos que tienen al Espíritu de Dios testifican de Jesús (1 Jn. 4:2). Eso significa en conclusión inversa, que ellos no pueden negarlo por medio de una marca anticristiana. Si la Iglesia de
Jesús tuviera que pasar por el tiempo del anticristo y de la marca, siempre tendría que tener miedo, y no poseería la seguridad de salvación. Además, se plantea la pregunta de porqué, después de 2,000 años, solo el resto de la Iglesia tendría que pasar por ese tiempo terrible de tentación.
• El tiempo de la Iglesia concluye con la plenitud de las naciones; luego, Dios se dirige otra vez hacia Israel (Ro. 11:25-26). El Apocalipsis nos muestra el tiempo en que Dios juzga, pero que también salva a Israel.
• En aquel tiempo, después de ser quitada la Iglesia y de completarse
el cuerpo de Cristo, todavía habrá personas que podrán ser salvas. Pero estos ya no pertenecerán a la Iglesia del cuerpo de Cristo. Por eso, a ellos se les dará otra vez condiciones, como en los evangelios, a través de los cuales podrán ser salvos; es decir, fe y obras, mientras que Pablo escribe claramente sobre la redención de la Iglesia, que es por fe sin obras (Ro 3:28). Estos, entonces, también serán amonestados a no aceptar la marca, porque si la aceptan, no podrán ser salvos.
Norbert Lieth
3 Comments
A MI ME ENCANTARÍA QUE FUERA COMPLETAMENTE CIERTO LO DEL ARREBATO DE LA IGLESIA y que no pasaremos por la tribulación de los últimos tiempos. Sin embargo los textos bíblicos, las palabras de Jesús, la historia del cristianismo y la realidad presente nos muestran que el cristiano ha sido, es y seguirá siendo perseguido y atribulado. Esa doctrina del rapto nunca se enseñó ni la escribieron durante los primeros 1.800 años del cristianismo. Pablo nos dice: «Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él,» Filip.1:29 y en Juan 15:20 dice el Señor: » Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán;» En Mateo 24 cuando los discípulos le preguntan a Jesús sobre su regreso y el fin de los tiempos, la respuesta del Señor nos da a entender que los escogidos pasarán por tremendas pruebas y algunos perderán la vida. Me pregunto entonces, ¿ seremos nosotros más privilegiados que los apóstoles y todos los cristianos que han sido y son hoy en día perseguidos, golpeados, encarcelados, torturados y asesinados? El regreso de Jesucristo será un acontecimiento único donde todo ojo le verá y no un regreso intermedio para arrebatar a la iglesia. Incluso cuando Jesús habla de la gran tribulación dice: «Y si aquellos días no fuesen acortados, nadie sería salvo; mas por causa de los escogidos, aquellos días serán acortados». Yo me pregunto, ¿Que hacen los escogidos en la tribulación si supuestamente han sido arrebatados» . Creo que una lectura detallada y meditada de Mateo 24, Marcos 13, Lucas 21 y todo el Apocalipsis nos debe poner a pensar que Jesús nos está diciendo que hay que estar preparados y ser fuertes porque cierra categoricamente diciendo: «Mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo.
14 Y será predicado este evangelio del reino en todo el mundo, para testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin». Y en Mateo 10:22 ya había dicho: » Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. EL QUE PERSEVERE HASTA EL FIN. recomiendo estudiar el término de «el día del Señor» tanto en el Antiguo como en el Nuevo testamento. Me basta ver las noticias como ya meten preso a alguien que no quiere casar homosexuales o practicar abortos. Ya hay leyes en varios países que envían a prisión por decirle a un homosexual que es pecador y en general como el círculo se va cerrando sobre los cristianos mostrándonos como los malos, intolerantes y provocadores de guerras. En muchos países actualmente son perseguidos y torturados o sencillamente prohibidos. Hermanos, el cristianismo ha sido, es y será la piedra en el zapato del mundo y sólo él que persevere hasta el fin será salvo. Pero Dios mismo nos da la perseverancia.
Querido hermano Miguel
Agradezco su preocupación por nosotros y su deseo de trazar bien la Palabra de Verdad. Es el deseo que compartimos y anhelamos como usted la venida de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
Estamos conscientes de que “en parte conocemos” (1 Corintios 13:9) e intentamos no ir más allá de lo que la Biblia nos enseña claramente. En cuanto al tema del rapto pretribulacional estamos conscientes de que hay varias escuelas que interpretan los mismos versículos de distinta manera. Creo que estamos de acuerdo que habrá un rapto o arrebatamiento de los creyentes vivos y muertos según Juan 14:1-3; 1 Corintios 15:50-56; y 1 Tesalonicenses 4:13-18
Por supuesto que sería más fácil ver todo como un solo evento, como usted propone. Pero esta lógica sencilla hizo que Israel, en los tiempos de Jesús, no reconociera a su Mesías. Conocían bien las profecías acerca del Mesías, pero no vieron que, en lugar de una vez, vendría 2 veces. Muchas profecías hablan en una misma frase de su nacimiento en Belén, y de su gobierno como Mesías sobre el trono de David. Sin embargo, hay dos mil años entre estas dos venidas. Con esto no demuestro que la segunda Venida tenga dos etapas, sólo muestro un posible paralelo.
En Juan 14:1-3 el Señor Jesús anuncia su ascensión al cielo y promete que irá a “la Casa del Padre” a preparar lugar para nosotros y luego vendrá otra vez para buscarnos y llevarnos a la Casa del Padre. (compare también Hebreos 9:28)
En 1 Tesalonicenses 3:13 el apóstol Pablo ora que los Tesalonicenses sean irreprensibles en santidad en la venida de nuestro Señor Jesucristo con todos sus santos. (Compare también Judas 1:14)
Zacarías 14 :4 dice que “se afirmarán sus pies en aquel día sobre el monte de los Olivos”
Y Colosenses 3:4 dice Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria.
Así que la venida del Señor se divide en una venida por los suyos y en una con los suyos. La primera será para ir al cielo, la segunda para venir a la tierra. Puedo estar equivocado, pero al leer Juan 14:1-3, parece que vamos a disfrutar por lo menos un tiempo de las moradas que Él nos preparó.
El segundo argumento es el carácter de la tribulación que la Biblia describe como un tiempo de tribulación cual nunca hubo ni nunca habrá. Un tiempo que la Biblia también llama el Día de Jehová, o Día del Señor, o día de la ira de Dios, o tiempo de angustia para Jacob (Isaías 13:9, Sofonías 1:15, Jeremías 30:7, Hechos 2:20, 1Tesalonicenses 5:2). Esta tribulación será distinta en su carácter de las tribulaciones que ahora sufren nuestros hermanos en distintas partes del mundo. La tribulación del tiempo final, será juicio de parte de Dios sobre los pecadores y un tiempo de prueba especialmente para Israel.
Y al verlo desde esta perspectiva, entonces la Iglesia no tiene lugar allí, porque no nos ha puesto Dios para ira, sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor Jesucristo (Juan 5:24; 1Tes. 5:9; Hebreos 9:28; Apo. 3:10)
Hay un tercer argumento y es que la Iglesia fue un misterio guardado en Dios, desconocido en el Antiguo Testamento y recién revelado en el Nuevo Testamento. (Efesios 3:1-11) Dios trató con Israel, hasta que Israel rechazó al Enviado de Dios y Dios desechó temporalmente y parcialmente a Israel. (Romanos 11:25; note “en parte” y “hasta que”; compare también “hasta que” en Mateo 23:38-39 y en Lucas 21:24). Dios usó el rechazo del Mesías por parte de la nación de Israel para revelar el plan que desde los siglos había estado escondido en Dios: La Iglesia, compuesta por judíos y gentiles que juntos formarían un nuevo hombre, el cuerpo de Cristo (Efesios 2:15). La Iglesia nació el día de Pentecostés y estará sobre la tierra hasta que entre la plenitud de los gentiles y tenga lugar el arrebatamiento. Luego Dios tratará de manera especial con su pueblo Israel. Israel pasará por lo que la Biblia llama “el tiempo de angustia para Jacob”. Y en este tiempo el remanente fiel de Israel será salvo (Zac. 12:10; Romanos 11:25-27) Cuando dice la escritura que aquellos días serán acortadas por causa de los escogidos, habla de los salvos del pueblo escogido. Para comenzar esta última etapa donde Dios juzga a las naciones y libera el remanente de Israel, entiendo que la iglesia va a ser quitada de la tierra, para luego volver a la tierra y para reinar con Cristo. Entonces todo será reunido en Cristo, siendo Él, el Rey de Israel, la Cabeza de su Iglesia y los reinos de este mundo habrán llegado a ser de nuestro Dios y de su Cristo y Él reinará por los siglos de los siglos.
Esto no significa que la Iglesia no tenga que estar preparada para tiempos de tribulación (2 Timoteo 3:12). La iglesia de Cristo siempre ha sido perseguida y es perseguida hoy en muchas partes del mundo. Y si el Señor no viene antes también en nuestros países latinoamericanos podrá haber persecución, y los ejemplos que usted menciona son prueba de eso. En esto estamos plenamente de acuerdo. Tenemos que estar preparado para enfrentar tribulación, lo dije tal cual en uno de los últimos programas de la Revista Radial. Pero, la tribulación que ha sufrido la Iglesia en el correr de la historia y que sufre hoy en Corea del Norte y en otras partes no es y nunca ha sido tribulación de parte de Dios, sino de parte de los que se oponen al Evangelio.
Esto sí significa que el Señor Jesús puede venir en cualquier momento para buscarnos, no necesito esperar primero la aparición del anticristo, sino la de mi Señor y Salvador. Sólo el punto de vista pretribulacionista mantiene la inminencia de la venida del Señor, tal como Pablo lo esperaba. Esto último no lo escribo para pelear, sino para enfatizar nuestra bendita esperanza, es decir, la gloriosa venida de nuestro gran Dios y Salvador Jesucristo.
No quiero añadir más ya que espero que lea con atención los versículos y que nos vuelva a escribir. No tengo la ilusión de cambiar fácilmente su parecer. No niego que haya argumentos para sostener un rapto después de la tribulación, pero compartí los textos y razones que me hacen justamente creer lo contrario y esperar al Señor todos los días.
Deseando que el Señor le bendiga y que haga crecer su amor por Él todos los días,
le saluda cordialmente en Cristo,
Juan Eisses
Llamada de Medianoche
Chip debajo de la piel…interesante articulo pero mejó con gusto a poco…quisiera saber más de los últimos tiempos…q pena q ya no puedo solicitar envio de revistas y noticias de Israel….un abrazo